Creación de la mayor red de Recarga de Vehículos Eléctricos del Reino Unido

La gente tiene una vida muy ajetreada y sabíamos que era importante que los clientes tuvieran un acceso fácil a los nuevos puntos de carga. La elección de lugares que fueran fácilmente visibles, pero que tampoco causaran ninguna interrupción a otros clientes que quisieran entrar y salir de la tienda, ya sea durante la instalación o su uso posterior, era una prioridad clave. También necesitábamos coordinar las actividades y evitar conflictos con cualquier otra iniciativa que Tesco o sus socios pudieran estar llevando a cabo.

Esto significaba trabajar con una amplia y compleja variedad de interesados, ser flexibles y adaptar nuestro enfoque en función de los diferentes lugares y situaciones. Al mismo tiempo, debíamos asegurarnos de que se analizaran y cumplieran todos los criterios técnicos y los principios de planificación. Si detectábamos alguna incoherencia o riesgo, podíamos sugerir cambios en el enfoque que fueran más eficientes y, en última instancia, asegurar que los cargadores eléctricos se instalaran con los criterios más exigentes y de la manera más rápida y menos perturbadora posible.

Al incorporar procesos claros y directrices completas para todas las áreas de actividad, desde el estudio y la instalación hasta la entrega final, pudimos garantizar que todos los contratistas que participaban en el proyecto fueran coherentes y precisos.